Ni gestos, ni contrapartida este 3 de noviembre. Cuando el independentismo desdeño ayer la decisión de la Abogacía del Estado de no acusar a los líderes del proceso por rebelión. A su vez calificaron todo esto como una simple venganza y represión democrática. La calificación de la Fiscalía y la petición de penas de cárcel.
El independentismo ha tratado todo esto como si se tratase de una respuesta manual. Tanto el presidente de la Generalitat, Quim Torra, como los partidos y entidades secesionistas salieron en tromba después de conocerse este 2 de noviembre la petición de penas de Fiscalía. En lo que fue una oleada de indignación que, no obstante, no generó ninguna respuesta. Tampoco se dieron a conocer más consecuencias políticas que las que ya están sobre la mesa. La más perceptible de todas ha sido el enfriamiento de la relación con el Gobierno. Esto se ha confirmado con la noticia de que el apoyo del PDECat y ERC a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) es imposible.
El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha acusado al presidente del Gobierno Español en ser uno de los principales cómplices de la represión
Durante un evento llevado a cabo en la cárcel de Lledoners, el presidente de la Generalitat, Quim Torra, lo confirmo. “El pueblo de Cataluña le retira su apoyo.” Esto lo dijo directamente contra Sánchez. “El independentismo no votará por los presupuestos.”
Por otra parte, el vicepresidente del Goyern, Pere Aragonés (ERC). Añadió. “A ningún gesto ni movimiento por parte del Ejecutivo Nacional. Imposible un gesto o movimiento por parte nuestra.” En términos también directos se expresó David Bonvehi, actual presidente del PDECat. Quien ha sido acusado por los escritos. “Un no rotundo para negociar con los presupuestos del Gobierno. Apoyamos un cambio de Gobierno, y lo hicimos sin pedir nada.” Apuntó. Aunque algunas fuentes políticas habían especulado que al independentismo, particularmente a ERC, le bastaría con el paso dado por la Abogacía del Estado para así reconsiderar su postura. Sin embargo, han dejado claro que ahora todo eso es imposible.
Quim Torra no está contento
Si la respuesta por parte de las formaciones independentista fue la previsible. Por otro lado se puede decir que la del presidente Quim Torra también lo fue. Quien por la mañana no quiso salir de su habitual zona de grandes proclamas sin mayores concreciones.
“Puede que estén confiados que ganaran unos cuantos votos. Además, acusó a Pedro Sánchez de ser cómplice de la represión.
“Hoy el Gobierno ha perdido una oportunidad única para sacar de los tribunales el conflicto de Cataluña.” Añadió Torra.
Esperando una respuesta
En cuanto a la relación institucional y de los partidos deja claro que si es necesario se debe producir un movimiento de respuesta contundente y con consecuencias más allá de las muestras de indignación.
Incluso la muy beligerante Asamblea Nacional se limitó a anunciar esta campaña de denuncia internacional. Así como una actitud incansable y persistente. Con la cual seguirán reclamando el independentismo.
La CPU llamó a convertir los juicios del proceso en un bumerán contra el Estado. Mientras que en una de sus corrientes llamó a huelga general el día que se lleve a cabo el juicio.