Un grupo de científicos investigan el genoma del trigo porque puede ser un descubrimiento revolucionario. Al día, ingerimos de media 1/5 calorías procedentes del trigo. Esta investigación puede permitir un trigo más resistente a enfermedades o al cambio del clima.
El trigo se haya desde El Cairo hasta Castilla y tiene diferentes formas de barra y esponjoso o redondeado. Solemos ingerir del trigo y su harina un 20% de las calorías diarias. Por eso, quieren secuenciar su genoma para intentar que este componente sea más resistente. Además, puede contrarrestar las plagas o los cambios climáticos.
Asimismo puede prevenir el hambre según comenta desde la organización Acción contra el hambre: «El trigo solo es el alimento de un tercio de la población mundial». Los científicos deben leer mejor sus genes para averiguar sus componentes e incluso que los toleren los celiacos.
La Sociedad Española de Agricultura Ecológica comenta el avance que se puede producir: «Los avances científicos está muy bien, pero lo que se debe conseguir es que sea una herramienta que se utilice de forma social y no para beneficio de algunas empresas». Este hecho es muy importante porque 1/3 habitantes del planeta necesitan este alimento y la pobreza en el mundo se podría erradicar de alguna forma.
Robo de trigo
Este alimento es imprescindible y los ladrones están al acecho. En Valladolid, se produjo un hurto de 1.000 toneladas en una nave industrial. Los dueños perdieron unos 240.000 euros, ya que su valor es muy alto. La Guardia Civil ha pedido a los agricultores que estén pendientes de proteger sus cosechas.
Esteban Sanz, encargado de los servicios agronómicos y cultivos de ACOR, comentó como sé realizan los robos: “Pues vienen unos camiones en ciertas horas de trabajo, con una pala y hoy se llevan ocho camiones, por ejemplo, mañana vuelven, con toda naturalidad. Necesitaron hasta 36 camiones para arrasar con todo, si no sería imposible vender la cantidad ingente de trigo robado”.