La madrugada de este miércoles fue destruida por segunda vez en menos de dos años, la estrella del presidente Donald Trump, en el Paseo de la Fama de Hollywood. La primera vez que sucedió fue en octubre del 2016, cuando era candidato republicano a la Casa Blanca.
El responsable del hecho es un joven de 25 años, llamado Austin Clay. Según las autoridades del Departamento de Policía de Los Ángeles, se encuentra bajo una custodia, y tendrá que pagar una fianza de 20.000 dólares. A diferencia del anterior autor que solo pagó 4.400 dólares y 20 horas de trabajo comunitario.
La teniente de la división de Hollywood, Karen Leong, indicó que luego de que este cometería el acto, llamó a la policía e informó que había destrozado la estrella de Donald Trump. A lo que anexo “los veo pronto”. Después de su entrega a la policía en Beverly Hills, declaró que se aproximó al lugar a las 03:30 hora local, y comenzó a despedazar la estrella con un pico que transportaba en el interior de una funda de guitarra.
La estrella al parecer es muy problemática, tales hechos suelen ser por el descontento que sienten las personas hacia este personaje. Como ocurrió tiempo atrás ha quedado pulverizada, tanto que ni se puede distinguir el nombre del multimillonario.
El anterior acontecimiento fue realizado por James Otis, un heredero de una marca de ascensores en el país. De acuerdo a las informaciones, se tiene previsto que este pague la fianza del nuevo destructor. Otis añadió que tiene la intención de correr con los gastos y de reunirse con él.
Estos no han sido los únicos desaires que ha recibido la estrella, ya que en enero del 2016 una persona logro pintar una esvástica encima de esta con un grafiti pidiendo silencio. Posteriormente, un mes después apareció a su alrededor una especie de muro de alambre en su parte superior, como forma de protesta por su postura frente a la migración. Además de esto, las personas que trabajan cerca del lugar han visto como la gente la pisotea, escupe y hasta permiten que su perro haga sus necesidades encima, lo que muchos catalogan como una falta de respeto para su persona.
El Paseo de la Fama
Según las políticas del Paseo de la Fama, este es un lugar donde se conmemoran las contribuciones positivas de los homenajeados. Está reservado principalmente para aquellas personalidades destacadas del cine, televisión, teatro, música y radio.
Donald Trump recibe su estrella en el 2007, la cual se debió a su participación especial en el programa de la cadena NBC «El Aprendiz», donde hacía el papel de juez. El mismo trataba de una especie de competencia donde cada miembro competía por dirigir una de las empresas de este. Así como a organizar los desfiles de uno de los concursos más importantes, el Miss Universo.
