En el horizonte legal de Donald Trump, la principal amenaza que se está viendo en tanto ha perdido la inmunidad presidencial, ha sido la larga y extensa investigación que esta dirigiendo Cyrus Vance en la fiscalía de Manhattan. Este lunes, el expresidente ha sufrido una relevante derrota en ese caso al haber rechazado el Tribunal Supremo el último intento de sus abogados, al haber ocultado su historial financiero, los contables de Trump van a tener que hacer entrega de sus declaraciones de impuestos y otros documentos que son solicitados por la fiscalía neoyorquina. La investigación que tenía cuatro meses estancada, debido a la negativa de Trump de hacer entrega de la información. Fue celebrado por el fiscal Vance, la resolución del Supremo que ha sido con un tuit de tres palabras: “El trabajo continúa”.
El alcance exacto que se ha obtenido de las pesquisas de la fiscalía, continua siendo un misterio, puesto que se encuentran protegidas por el secreto del procedimiento del gran jurado. En el conjunto de los casos judiciales que tiene Trump encima, después de haber abandonado la presidencia, tras abandonar la presidencia, la única investigación penal abierta que tiene en su contra actualmente. Inició con la investigación al respecto de los supuestos pagos hacia dos mujeres, que fueron declarados supuestamente como que han sido gastos legales, a lo largo de su campaña presidencial de 2016, con el fin de que no contaran las relaciones sexuales que estas dijeron que mantuvieron con el aspirante a presidente. Sin embargo esta investigación creció y, en la documentación que se tiene de esta misma batalla para que se obtengan las declaraciones fiscales de Trump, el equipo de Vance ha hablado al respecto de “una amplia y prolongada conducta criminal en la Organización Trump” y ha sido sugerido que están investigando varios delitos financieros potenciales, como fraude de seguros hasta evasiones de impuestos, como también pasando por un fraude bancario.
Fiscalía le hizo la solicitud a los contables de Trump, hace un poco más de un año, la información de sus finanzas desde el año 2011. En julio de año anterior, fue rechazado por el Supremo, el argumento de que los fiscales no podían investigar a un presidente en activo. Sin embargo, le fue indicado a Trump, que este podía hacer el intento de impugnar la solicitud de la fiscalía, haciendo el reclamo de las mismas protecciones de las cuales puede disponer cualquier ciudadano en contra de actuaciones que sean de mala fe. Esto ha hecho el equipo legal del presidente, sin embargo, los argumentos que ha dado han sido rechazados en primera y segunda instancia. Por lo que han acudido al Supremo, que volvió a dar la razón al fiscal Vance.
Trump en su primera campaña presidencial en el año 2016, prometió que iba a hacer públicas sus declaraciones de impuestos. Sin embargo, en vez de hacer esto, estando en la Casa Blanca, estuvo luchando para que esta información no viera la luz pública. Estando bajo el secreto del gran jurado, no se tiene claro que el hecho de que los documentos fuesen entregados a la fiscalía, iba a implicar de forma necesaria que el público iba a poder verlos. Aunque, en tanto este se libraba de la batalla en los tribunales, The New York Times, hizo la publicación de una serie de informaciones exclusivas, después de haber obtenido dos décadas de declaraciones fiscales de Trump, en las que fue revelado que sus declaraciones del impuesto sobre la renta le iban a salir a no pagar en 11 de los últimos 18 años y que apenas pagó 750 dólares tanto en 2016 como en 2017.