
Por 521 votos a favor y 73 en contra Boris Johnson, logró el apoyo abrumador del Parlamento Británico el cual fue respaldado mayoritariamente por la oposición laborista a su acuerdo comercial con Bruselas, la llamada “Ley de la Futuras Relaciones con la Unión Europea», ha sido aprobada por la Cámara de los Comunes , en un debate de cinco horas, en el que han puesto fin a la larga letanía de cuatro años y medio desde la victoria del Brexit en el referéndum de la UE.
Se espera que la Cámara de los Lores, de su visto bueno al proyecto de Ley en las próximas horas y para antes de esta pasada medianoche, recibiría el consentimiento de la Reyna Isabel II , en un trámite asombroso por la urgencia en un periodo de vacaciones navideñas, además en plena cuenta atrás del lapso de transición del Brexit, que culmina el día de hoy, siendo el último día del año 2020.
Boris Johnson ha instado a los parlamentarios Británicos a «abrir un nuevo capítulo de nuestra historia” y ha festejado el inicio de “una fantástica y nueva relación con la UE”. “Esta Resolución pondrá fin a la molesta cuestión sobre la relación política del Reino Unido con Europa que ha atormentado nuestra historia desde la posguerra”, sostuvo el líder conservador.
Johnson vaticinó «Vamos a ser amigos y aliados de la UE, Pero vamos a recuperar el control de nuestro destino y de nuestras propias leyes».
Y por su parte, Boris Johnson contaba con el respaldo de sus 364 diputados incluyendo el ala dura del partido y con el voto favorable del líder de la oposición laborista Keir Starmer. EL Partido Nacional Escoces (SNP), el Partido Liberal Demócrata y el Partido Democrático Unionista DUP) votaron en contra.
CRITICA POR LA PREMURA EN UNA DOBLE SESION ESPECIAL
Por falta de tiempo para realizar un auténtico debate, realizan una doble sesión especial donde la Cámara de los Comunes y la Cámara de los Lores servirán previsiblemente en bandeja el texto a la Reyna Isabel II, para que estampe su «consentimiento real» al filo de la medianoche del 30 diciembre, un día antes de que culmine el período de transición del Brexit.
Johnson añadió «El propósito central de esta ley es conseguir algo que los británicos siempre supieron con sus corazones que se podía conseguir”, aunque les dijeron que era imposible. “Básicamente, seremos capaces de tener relaciones comerciales y cooperar con nuestros vecinos europeos, en los términos más cercanos de amistad y buena voluntad, pero manteniendo el control soberano de nuestras leyes».
Por otra parte presumió de haber logrado el acuerdo con Bruselas en un tiempo record pese a las circunstancias: “Lo hemos hecho en menos de un año, entre los dientes de la pandemia, y hemos seguido adelante con la tarea pese a las peticiones de un nuevo retraso, precisamente porque crear certidumbre es la mejor oportunidad para derrotar al Covid y lograr una recuperación más fuerte el próximo año”.
EL MEJOR AMIGO Y UN ALIADO DE LA UE
El “premier” se comprometió a trabajar “mano a mano” con los 27 “cuando confluyan nuestros valores y nuestros intereses, pero cumpliendo siempre con el deseo soberano del pueblo británico de vivir con sus propias Leyes, hechas por su propio Parlamento electo».
En la ronda de preguntas sobre el contenido del proyecto de Ley sobre la Futura Relación con la UE, Boris Johnson ha entrado en detalles sobre el controvertido acuerdo de la pesca. «En última instancia vamos a tener control de hasta el último pez nuestras aguas”, fue lo que advirtió el “premier”. “durante la transición de cinco años y medio tendremos acceso a 130.000 toneladas más de pescado y todas las partes del Reino Unido, incluidas Escocia e Irlanda del Norte, se van a beneficiar de nuestras inversiones en el sector.”
De igual manera sostuvo “en contraste, lo que pretende el Partido Nacional y “Nacionalista” escoces es volver a ceder el control de su pesca a la Unión Europea y con su voto en contra, el SNP está de hecho votando a favor de un no acuerdo”.
Por su parte, Starmer a la hora de justificar el voto a favor del Partido Laborista perdió su habitual compostura parlamentaria ante Johnson, aun después de criticar la falta de sustancia y las carencias del acuerdo pero sostuvo “La decisión esa así de simple o votamos a favor de este texto, o apoyamos el ‘no deal’ ”.