El Secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, llego a Colombia el día de ayer, al final de una calurosa tarde. Este se presentó en el país en medio de visita esperada no tanto por su fin humanitario. Sino por cierto clima de malestar que se vive entre los colombianos. Tras las recientes palabras un poco desentonados del presidente Donald Trump hacia la gestión de Iván Duque, el mandatario colombiano. Especialmente cuando el país se encuentra en una lucha constante contra el narcotráfico.
El origen principal de la visita de Pompeo a la ciudad de Cúcuta. Ciudad que es una de las principales fronteras con Venezuela. Y que además ha sido la gran puerta de entrada para la inmensa migración que ha llegado a Colombia. Ya que para estos tiempos se estima que la cantidad de venezolanos que han entrado al país es de 1,2 millones de venezolanos. Por lo tanto, su visita se basaría principalmente en conocer de primera mano los Centros Transitorios. Donde actualmente cientos de venezolanos viven temporalmente. Así como visitar las bodegas donde aún espera quieta la ayuda humanitaria que no pudo pasar el pasado 23 de febrero.
Mike Pompeo, le aseguro a Colombia que, harán todo lo posible para reducir la compra de drogas ilícitas en su país. Esto lo hizo en medio de la segunda visita del jefe de la diplomacia estadounidense en menos de tres meses. Después de un periplo que lo llevó de sur a norte por Sudamérica.
Mike Pompeo
El jefe de la diplomacia llego a Colombia vestido informalmente. Y fue recibido en el aeropuerto por el canciller Carlos Holmes Trujillo. Y por el embajador de Colombia en Washington, Francisco Santos. Para de allí desplazarse rápidamente hasta uno de los albergues, donde lo recibió el presidente Duque.
El tema obligado sin duda alguna en la reunión bilateral fue la reiterada condena al Gobierno de Nicolás Maduro. Además del mutuo compromiso por restablecer la democracia en Venezuela y nuevas medidas para atender la crisis migratoria. Que ya hoy en día afecta a buena parte de los 2.200 kilómetros de frontera binacional. Pero que tiene en Cúcuta su epicentro.
Pompeo y las comitivas se desplazaron al Puente Internacional Simón Bolívar. Donde pudo saludar a venezolanos que habitan en esta zona limítrofe y se acercaron hasta allí. Ese mismo lugar que hace unas semanas fue escenario de fuertes confrontaciones al tratar de pasar ayuda humanitaria de víveres e implementos médicos al vecino país.
Altas temperaturas
El clima en Colombia estaba bastante caliente, por lo tanto el Secretario de Estado Mike Pompeo. Tuvo que soportar temperaturas por encima de los 30 grados centígrados. Además de que la sensación térmica era mayor debido al gran malestar por las afirmaciones poco diplomáticas. Por decirlo de algún modo, que el gobierno de Trump lanzó contra el gobierno colombiano en los últimos días.
En esta visita hubo más trastienda de este encuentro entre el Secretario y el presidente Iván Duque. Que con Estados Unidos ha tenido una mala semana, a pesar de que, desde el inicio de su mandato en agosto pasado. Se ha mostrado como el aliado incondicional de Estados Unidos.
Ya que para causar sorpresa y malestar de todos los colombianos, el miércoles el presidente Donald Trump. Se encargó de lanzar nuevamente palabras poco amables hacia el presidente Duque. Palabras que además fueron muy injustas con el pueblo colombiano. Ya que hace quince días se refirió al mandatario colombiano como “un buen tipo”. Pero que “no ha hecho nada por nosotros”, en el contexto de la lucha contra las drogas. En especial el tráfico de narcóticos a Estado Unidos.
Y este pasado miércoles se repitió la dosis al afirmar que Colombia está enviando “sus peores criminales” a EE.UU. sin embargo, la diplomacia colombiana, tal vez un poco perpleja. Se demoró un poco en responder, mientras el país entero vociferaba en contra de la conveniente miopía del gobierno Trump. Reclamando que no hay país en el mundo que haya aportado más sangre, sudor y lágrimas en esa lucha. Incluidos candidatos presidenciales, ministros de Estado y ciudadanos, víctimas inocentes de esa larga y dolorosa historia de lucha contra las drogas.
