El complejo turístico Monte Kumgang, este lunes 20 de agosto ha sido testigo de la reunión de familias de Corea del Norte y Corea del Sur, desde la última reunión que se celebró en 2015. Se encuentran planificadas seis encuentros entre los allegados durante tres días. La mayoría del grupo de personas son ancianos y veteranos de guerra, separados cuando la Península se dividió, en el periodo de guerra entre 1950 y 1953.
Tras haber perdido el contacto por más de seis décadas entre parientes, la tercera parte de surcoreanos se reunirá con familiares de primer grado de consanguinidad (hijos y hermanos), y el resto con parientes lejanos de tercer grado de parentesco.
Este evento, el primero de las dos reuniones pactadas de este tipo, es uno de los convenios a los que llegaron el presidente surcoreano Moon Jae-In, y el líder norcoreano, Kim Jong-un, acuerdo que se dio en la reunión que sostuvieron a finales del pasado abril.
La Cruz Roja prestando el apoyo al encuentro
Estas reuniones surgieron del acercamiento entre Seúl y Pionyang, en donde la Cruz Roja ha jugado un papel de suma importancia. Como organismo ha participado en la organización de los encuentros; los preparativos se iniciaron en el mes de julio, con el intercambio de listados de personas que deseaban ver a sus familiares.
El estado de salud, es uno de los principales criterios que se ha tomado en cuenta para elegir a las personas que asisten a este evento, ya que la mayoría son personas que superan los 70 años, y tienen condiciones de salud que los puedan afectar al momento de reunirse con sus familiares, y es que hay que recordar que técnicamente ambas Coreas se encuentran aún en guerra.
Una lista de 250 surcoreanos, fue entregada por parte de la Cruz Roja de Corea del Sur al territorio norcoreano. A su vez la Cruz Roja de Corea del Norte respondió con una lista de 200 personas, que quieren ver a sus familiares que se encuentran residenciados en Corea del Sur.
La emoción del encuentro entre familias de Corea del Norte
Aproximadamente 185 familias de corea del norte se reunieron con 89 parientes surcoreanos; trasladados en 14 autobuses desde la ciudad surcoreana Sokcho, y cruzaron la militarizada línea divisoria a primeras horas de la tarde, las imágenes muestran a los familiares dominados por la emoción, las lágrimas han estado presente, y conversaciones entre grupos de veteranos.
Los familiares surcoreanos se presentaron con regalos como medicinas, calcetines, chaquetas y paquetes de dulces muy preciados por los norcoreanos como lo es el Choco Pies; estos encuentros refuerzan las convicciones de la necesidad de conseguir la paz en la Península.
Desatascar el dialogo sobre la desnuclearización entre el régimen y Estados Unidos. Es otro de los puntos que se espera tengan un desenlace positivo. A raíz de estos procesos de acercamiento entre los dirigentes de Corea del Norte y Corea del Sur. Se estima se lleguen a acuerdos en la próxima cumbre a celebrarse en Pionyang en septiembre.