Este 20 de agosto, la Comisión Europea comenzó a celebrar que Grecia quedase libre de una era de rescates y que diera por cerrada la crisis del euro. Fue el mismo Euro grupo que puso punto final a la era de rescates, y tras haber transcurrido 8 años, Grecia al fin está libre de esta crisis.
No fue solo Grecia quien se vio involucrada en este estado tan deprimente, también Irlanda, Portugal, Chipre y la banca española, tuvieron que ser rescatados. La Comisión Europea sabía que todos estos escenarios habían puesto jaque al euro y se comenzó a dudar sobre la factibilidad del proyecto comunitario.
El director y gerente del fondo de rescate europeo, Klaus Regling, expresó:
«Siempre hablo de Portugal, España, Chipre e Irlanda como casos de éxito. A partir de ahora podré incluir a Grecia en ese grupo».
Grecia no obtendrá más dinero de los acreedores
Desde este lunes, Atenas, la capital de Grecia, comienza a ejercer su soberanía política y económica. Ahora deberá crear los mecanismos convenientes para realizar su propio financiamiento dentro de los mercados. Con esto, no habrá más dinero de los acreedores. Y Bruselas, Fráncfort y Washington no emitirán nuevas órdenes que este país tenga que cumplir, dejando a salvo solo los compromisos adquirido.
Hay que recordar que Atenas, contaba con una deuda gigantesca que sobrepasaba el 180 % del Producto Interno Bruto (PIB). Luego de transcurrir 8 años y llegar a un estimado de 289.000 millones, el país se libera. Sin embargo, la tríada formada por la Comisión Europea, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Central Europeo revisará la situación fiscal 4 veces al año.
El Gobierno se vio humillado muchas veces
El Gobierno se vio humillado muchas veces, porque la crisis afectaba completamente sus problemas financieros. Durante este período las intervenciones de los demás países no se hicieron esperar. Los políticos alemanes por ejemplo, aconsejaban que vendieran parte de sus islas para resolver algunos gastos.
Grecia quedó devastada con toda la deuda que tenía y que no podía cubrir, por lo que se vio obligada a realizar muchos ajustes económicos. Los recortes de las pensiones y la congelación de los salarios fue apenas la entrada al precipicio en el que se encontraba. Un tercio de la población quedó al borde de la pobreza. Los hogares se han visto afectados, pero la bancas también por los préstamos fallidos y tasas de morosidad.
Se ha estimado que miles de turistas comienzan a visitar los puertos de las islas griegas y a disfrutar de lo que han llamado el nuevo nacimiento de Grecia. Las expectativas sobre el funcionamiento de todos los aspectos socioeconómicos empiezan a tomar tranquilidad. La plaza Síntagma, que durante mucho tiempo ha sido la portavoz de muchas protestas, hoy vuelve a la normalidad.
Aunque los habitantes de Grecia, no han olvidado lo vivido en años anteriores, están dando un voto de confianza al cambio. Saben que deben mantener la convicción de que les espera un mejor futuro a partir de ahora.
