La intolerancia alimentaria es una realidad que ha día de hoy afecta a gran parte de la población. En muchas ocasiones sentimos que nuestra barriga se hincha de manera desorbitada o un malestar. Lo habitual es achacarlo a que te ha tenido que sentar mal la comida, que no esta bien cocinada o algo similar. Pero pocas veces nos paramos a pensar que puede ser que algo no vaya bien en nuestro organismo. Lo más probable que nos suceda es que estemos sufriendo una inflamación alimentaria. Os preguntareis que es este nuevo termino. Pues bien una inflamación alimentaria es lo que ocurre en nuestro organismo cuando el mismo supera el umbral de aceptación de uno o varios alimentos.
Dicho esto podemos entender que esto nos pasa más a menudo de lo que creemos. Lo que debemos es reeducar nuestro organismo para conseguir comer lo que nos está haciendo sentir mal, pero de manera correcta. Así mismo tenemos que tener en cuenta que no es lo mismo una inflamación que una intolerancia alimentaria. Las intolerancias alimentarias son las reacciones desfavorables que tiene nuestro organismo ante algunos alimentos. Es decir, dicho en términos que todos entendemos, una intolerancia alimentaria es aquella que nos produce una reacción en nuestro organismo. Pueden presentarse esta reacción como ronchas, nauseas, vómitos, diarreas… en cada cuerpo se presenta la reacción de una manera u otra. También varía según el alimento que nos provoque la reacción. Las intolerancias puedes ser hereditarias o de origen genético.
El tema de la alimentación es tan importante que puede afectarnos mas de lo que pensamos. Nos influye en nuestro estado de ánimo, en como nos sentimos enérgicamente, psicológicamente, etc. Es tan importante una buena alimentación que sin ella se producen muchos desencadenantes en nuestro cuerpo, tales como la obesidad, hipertensión, problemas circulatorios…pero otro de los problemas que pueden derivar de la alimentación son las migrañas. Las causas de las migrañas a veces vienen dadas por algún alimento que es el desencadenante. Para poder hablar de que provocan las migrañas, primero os tengo que decir que son. Éstas son uno de los muchos tipos de dolor de cabeza que existe. Sólo que este tipo de dolor es muy intenso y con una duración diferente. Normalmente el dolor está localizado en una parte de la cabeza en concreto, aunque no siempre se cumple esta norma. Para que puedas identificar bien que es una migraña los síntomas más claros son: nauseas, ver auras, ser hipersensible a la luz, vómitos…El dolor de una migraña puede llegar a ser tan grande e intenso que la persona que lo padece puede quedar totalmente inhabilitado para realizar cualquier tipo de tarea.
El tiempo que dura una migraña va desde las 3 horas hasta llegando a alcanzar 3 días. Se sabe de casos en que llegan a tener mucho más tiempo de dolor. Para evitar esto hay muchos tipos de alimentos que desencadenan este gran dolor para muchas personas. Como lo son el chocolate, los lácteos, el vino, frutos secos… Pero esto no quiere decir que a ti te los provoquen, es solo que existe la posibilidad. Las migrañas no tienen cura, pero si que podemos mejorarlas o evitarlas, evitando comer alimentos que nos la provoquen.
Así mismo, como en las migrañas, las inflamaciones alimenticias también se pueden remediar con un buen control de lo que comemos. Es por ello que si sufres de este tipo de síntomas y sientes que tu cuerpo no está bien del todo, acude a tu médico. Ellos normalmente te dirán dietas y demás pero quien realmente sabe de los temas de alimentación son los nutricionistas. Ellos te pueden ayudar a saber que sucede, si estas alimentándote bien y como solucionar los problemas que te esté causando.
