A partir de una investigación llevada a cabo por expertos de la Universidad del Sur de Dinamarca y el Instituto Max Planck de Investigación del Metabolismo de Colonia en Alemania, se descubrió la posibilidad del desarrollo de nuevos tratamientos efectivos contra la obesidad, donde además, también actuaron investigaciones de la Universidad de Medicina de Viena en Austria. Lo resultados obtenidos más importantes, se basaron en que los niños heredan la grasa más peligrosa de sus padres. Por el contrario, estos heredan la grasa buena de sus madres. Conclusiones que fueron actualizadas a principios del mes de septiembre.
Siendo así, el primero paso para desarrollar nuevos tratamientos completamente innovadores, para aquellas enfermedades relacionadas con la obesidad. Este estudio, fue publicado en Nature Communication.
Los niños heredan la grasa mala de los padres y la buena de sus madres https://t.co/LmPO42hOvL Via: ABC – Salud pic.twitter.com/OLhnz8DWVm
— Metafisica (@metafisica) September 7, 2018
En este sentido, el equipo descubrió una nueva e importante función del gen H19. Este gen monoalélico, tiene un efecto protector contra el desarrollo del sobrepeso. Por lo cual, podría impedir la aparición de enfermedades asociadas al mismo. Entre estas se encuentran: enfermedades cardiovasculares y la diabetes. Siendo además, un gen que puede controlarse, ya que es heredado exclusivamente de la madre o del padre.
Los genes derivados del padre conducen al desarrollo de la grasa mala
Además, los expertos también fueron capaces de descubrir que los genes derivados del padre, poseen esencialmente el incremento de tejido graso blanco. Este, es conocido fácilmente como grasa mala, que frecuentemente se encuentra en el estómago, zona baja de la espalda y los muslos.
Asimismo, dicho tejido graso blanco, es capaz de conducir enfermedades metabólicas. Tomando en cuenta así, la diabetes, la obesidad, el hipertiroidismo, y hasta el Alzheimer.
Por otro lado, los genes de la madre favorecen al desarrollo de grasa buena o tejido graso marrón. Este, se caracteriza especialmente por tener un gran efecto protector contra la obesidad. Siendo principal objeto de estudio de los investigadores, para constatar el funcionamiento del tejido adiposo. Este, en concreto, es la grasa parda que de cierta forma, puede permitir un mejor estudio para entender y luchar contra los problemas causados por la obesidad.
Es importante resaltar que, la grasa corporal es fundamental para mantener el equilibrio energético y también, ayuda a regular la temperatura del cuerpo. Sin embargo, no toda la grasa es igual, ya que el metabolismo cuenta con dos tipos de tejido graso. Así, se toman en cuenta un tejido adiposo blanco que almacena calorías extras. Por otro lado, está el tejido marrón que se considera grasa buena, y quema energía para generar calor. Desmintiendo de esta forma, una visión pasada que aseguraba que la grasa no tenía una función fundamental en el cuerpo. Lo cual, podría producir una solución a la obesidad, posteriormente.
Beneficio del gen H19
Durante el estudio realizado, los investigadores identificaron que el gen H19 realiza un efectivo control de genes sobre las células grasas marrones. Además, pudieron demostrar que una sobreexpresión del gen H19, protege al organismo contra la obesidad y la resistencia a la insulina. Siendo un experimento llevado a cabo en ratones.
Finalmente, aseguran que serán capaces de detectar patrones muy similares de control de genes en las personas obesas. Siendo un gran paso para desarrollar nuevos tratamientos que eviten la obesidad.