Uno de los problemas más comunes que podemos encontrar con el mobiliario de una vivienda antigua es que no se encuentre en las mejores condiciones posibles, ni a nivel funcional ni estético. Una situación que puede deberse a muchos factores, como el paso del tiempo, el uso continuado del mueble, un mal mantenimiento del mismo, la humedad, etc. Lo bueno es que solucionar este tipo de desperfectos en los muebles es una tarea muy sencilla de llevar a cabo, siguiendo solo una serie de pasos y consejos prácticos como los que traemos a continuación.
En primer lugar, es necesario tener en cuenta que para poder ponerse manos a la obra con el fin de realizar este tipo de tareas y obtener los mejores resultados posibles, es esencial contar con las herramientas más adecuadas. Tal y como dice Jesús Hernández, experto en Misstoolbox, adquirir herramientas de calidad siempre es uno de los aspectos clave para poder realizar cualquier tipo de trabajo de reparación de muebles, de una forma mucho más cómoda, sencilla, rápida y eficaz, por lo que antes que nada, debes echar un vistazo a tus herramientas y valorar si necesitas ampliar tu stock.
Limpieza y reparación
Para poder rejuvenecer muebles adecuadamente, lo primero que tenemos que hacer es limpiarlos bien con agua y jabón para eliminar los restos de suciedad. A continuación tenemos que eliminar la pintura y el barniz mediante un decapante, una brocha, una espátula y una lija. Además, tenemos que fijarnos bien en si el mueble tiene carcoma, y si es así, se debe aplicar un producto especial para dejarlo completamente limpio. De esta forma, dejaremos el mueble totalmente listo para poder empezar a trabajar adecuadamente en él y llevar a cabo ese proceso tan importante de restauración.
El siguiente paso que tenemos que dar es el de reparar sus imperfecciones, por ejemplo, tapando sus fisuras y arañazos con masilla o con cera, cambiando las bisagras que no funcionen correctamente, así como las cerraduras que pueda tener. Una vez que hayamos realizado este proceso, lo siguiente que podemos hacer será pintarlo para obtener el color en el mueble que queramos. Para todas estas es necesario contar con una serie de herramientas básicas, como lijas de diferentes tamaños, pinceles, destornilladores, espátulas, etc.
Barniz y cera
Uno de los pasos más importantes que tenemos que llevar a cabo cuando queremos rejuvenecer un mueble antiguo es el de aplicar barniz, que puede ser mate o satinado, en función del resultado final concreto que queramos conseguir. Tan solo tendremos que aplicar el barniz y dejarlo secar durante todo un día; cuando esté seco, lo lijamos para que toda su superficie esté regulada, quitamos el polvo que este proceso haya podido provocar y aplicamos una segunda capa de barniz, pero ahora en el sentido de la veta.
El siguiente paso sería aplicar un poco de cera incolora con un algodón para conseguir un resultado final genial, con un aspecto mucho más natural a simple vista. Y ya tendríamos todo el proceso de rejuvenecimiento de nuestros muebles antiguos listo para volver a utilizarlos y ofrecerles así una segunda vida. Además, como hemos podido comprobar, se trata de un proceso de renovación muy sencillo de llevar a cabo, que cualquier persona puede llevar a cabo sin problemas si cuenta con los materiales y las herramientas necesarias y más adecuadas para conseguir los mejores resultados posibles, para esta labor casera muy reconfortante.