Hace poco más de un año que comenzó a hablarse de manera masiva de la Inteligencia Artificial. La aparición de la herramienta ChatGPT impulsó a muchas tecnológicas a desarrollar sus propias alternativas a este chat generativo, lo que ha dado lugar a numerosas aplicaciones que actualmente ya se utilizan en el sector del marketing, la comunicación, las finanzas y la banca o el ecommerce.
Este impulso de la IA hizo creer a muchos expertos que las herramientas o canales que triunfaron hasta ese momento en una disciplina como el marketing digital iban a caer en el olvido. Sin embargo, la realidad ha sido diferente. Las técnicas clásicas de marketing online siguen resultando muy necesarias, sobre todo aquellas que han sabido recoger todo lo bueno de la IA, entre ellas una de las más destacadas es el email marketing.
Por definición, hacer marketing digital a través del correo electrónico no es más que utilizar esta vía de comunicación para poner en contacto a empresas con clientes y afianzar una relación más fluida para que haga crecer a la empresa a través de más ventas, más suscriptores o la expansión de la marca. El email marketing continúa como una apuesta esencial dentro del marketing digital por beneficios como los siguientes.
Una fórmula promocional muy económica
El envío de emails publicitarios o en los que se aporta información sobre nuevas campañas, promociones o ventajas vinculadas a ser suscriptor de una newsletter resulta muy económico. Se trata de un canal comunicativo poco costoso que, además, es altamente efectivo cuando está bien diseñado.
Los clientes, tanto los actuales como los potenciales, quedan informados de todas las novedades, ofertas y aspectos interesantes que puede ofrecer la empresa sin tener que realizar una gran inversión. De hecho, algunos gestores de correo electrónico ofrecen cuenta gratuita con la que permiten acumular miles de suscriptores y realizar envíos masivos, pero personalizados.
Canal muy eficaz y con resultados fáciles de medir
El bajo coste de las campañas de email marketing está ligado a un elevado retorno de la inversión. De la mano de las newsletter podemos hacer llegar los correos electrónicos solo a las personas que verdaderamente están interesadas en esos productos o la información.
Esto obliga a un buen trabajo de segmentación de la audiencia que puede ir ligada a otras estrategias de marketing, como las redes sociales. A su vez, todo esto va de la mano de datos que son fácilmente medibles. Toda empresa que realiza una campaña de email marketing tiene a su disposición casi de manera inmediata resultados sobre la tasa de apertura, la de rechazo, la ganancia de suscriptores y otros datos que le permiten calcular el éxito de sus acciones.
Mantener una relación más directa con los clientes
Otro aspecto beneficioso del email marketing, y que lo diferencia en parte de las redes sociales, es que a través de los correos las empresas pueden tener una relación directa con sus clientes. Son ellos quienes dan permiso a la empresa para comunicarse con ellos formando parte de las newsletter.
Pero los mensajes que reciben los clientes le llegan de manera exclusiva a ellos, en un intercambio comunicativo que no incluye a nadie más. No ocurre así en redes sociales, donde hay muchos otros usuarios que sí pueden tener acceso a esas conversaciones (salvo si se producen a través de mensajes privados).
Hacer sentir especiales a los clientes
El punto final resume en pocas líneas todas las ventajas del email marketing. Este canal está pensado para generar interacciones más fluidas entre clientes y la propia empresa. Para ello, por supuesto, hay que tener presente qué tipo de consumidores se busca y proponerles información o recursos de valor por los que puedan estar interesados.
A partir de ahí, los envíos de correos electrónicos harán sentir a esos clientes como parte especial. La vinculación con la empresa aumenta e incluso pueden llegar a convertirse en potenciales comerciales de la firma. A través de una vía de comunicación que es muy económica, el cliente se siente especial, ya que recibe envíos que él mismo ha solicitado y siente ventajas frente a otros consumidores, ya que los productos o las campañas puestas en marcha están diseñadas para satisfacer sus demandas o necesidades.
