Este 11 de septiembre, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tuvo una intervención en el Senado español en la que insistió en la ley del diálogo para apaciguar la situación tensa que se vive en Cataluña. Antes de su ponencia, el portavoz del Partido Popular, Ignacio Cosidó, apuntó que las conversaciones con los independentistas sería un grave error para la política en la nación hispana.
En la sesión de control del Senado de este martes se presentó una fuerte disputa entre Cosidó y Sánchez. El primer mandatario rechazó la propuesta del representante del PP, donde le hacía un llamado a rectificar su intención de conversaciones entre los catalanes, haciendo hincapié en que su Gobierno apostará siempre por la ley y el diálogo que debe promover el presidente de la Generalitat, Quim Torra.
Aquí puedes ver el video con las preguntas de los senadores al Gobierno. Está catalogado por intervenciones 📺 https://t.co/4yS7Mo4eOB pic.twitter.com/GZc4WAIXZA
— Senado de España (@Senadoesp) September 11, 2018
Asimismo, el presidente apuntó que durante los siete años del gobierno de Mariano Rajoy, quien formaba parte del Partido Popular, el grupo político fue incapaz de realizar un diálogo entre el Gobierno español y el Govern catalán. «Hay que apostar por el diálogo, hay que instar al presidente Torra a abrir un diálogo entre catalanes, no de Cataluña contra Cataluña, y el Gobierno tiene que animar a ese diálogo» aseguró en su intervención.
El portavoz del PP, quien tomó la palabra antes que Sánchez, hizo un llamado al presidente para que dialogase con aquellos partidos que se encargan de defender la constitución, y permiten que se desarrolle la democracia en España, para que pudiesen tomar una decisión ante el desafío separatista que se ha presentado en los últimos meses en la política española.
Diada de Cataluña
Mientras se presentaba el debate político en el Senado de España, decenas de miles de personas marchaban en las calles de Cataluña como parte de la celebración de su día nacional. En esta concentración participaron integrantes de ERC y el PDeCAT, quienes no participaron en el pleno, para asistir a la protesta donde se llevaban consignas en pro a la liberación de los presos políticos catalanes y a favor de la independencia.
Casi año después de la crisis política que se presentó el 1 de octubre, donde se celebró ilegalmente un referendo en Cataluña para cuestionar a los ciudadanos si estaban a favor de la separación, Barcelona se desbordó de personas que quieran una sola cosa: la independencia. En este sentido, el presidente de la Generalitat, Quim Torra, hizo un llamado al Gobierno de Pedro Sánchez, para mantenga su posición y preste atención al grito democrático que se presentó este martes.
La multitud, que se desplegó a lo largo de la Diagonal de Barcelona, actuó bajo el llamado de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) y según datos suministrados por la Guardia Urbana, contó con la participación de un millón de personas.
Al finalizar la concentración, la presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, exigió al Govern que no menosprecie la faena realizada por el movimiento independentista, diciendo que lo que se vivió el 1 de octubre del año pasado no era un referendo y pidió que se preparase para un nuevo embate democrático en contra del Estado.