El Papa Francisco sostuvo este 13 de septiembre una reunión con representantes de la Iglesia católica de Estados Unidos, quienes pidieron respuestas al Vaticano sobre la ola de denuncias sobre abusos sexuales por parte del clero, el cual se ha venido acrecentando considerablemente en los últimos tiempos.
El papa recibió al presidente de la Conferencia episcopal estadounidense, cardenal Daniel DiNardo, al vicepresidente, arzobispo José Horacio Gómez y al secretario general, obispo Brian Bransfield. Así como al arzobispo de Boston, Sean O’Malley, presidente de la Comisión pontificia para la protección de menores.
El Papa enfrenta una de las peores crisis
En su manejo sobre la crisis de abusos sexuales, el papa enfrenta el mayor escándalo en la historia de la iglesia católica. En este sentido, Mark Vincent Healy, uno de los abusados sexualmente del clericalismo, destacó que la falta de acción del Papa ha dejado a los sobrevivientes temiendo que se les otorgue solo un pequeño castigo a los responsables.
«El papa Francisco ha tenido desde marzo de 2013, cuando fue elegido, el momento de lidiar con el escándalo del abuso sexual infantil del clero» – Mark Healy, sobreviviente
El papa también enfrenta presiones de Alemania, esto tras el aporte revelador que realizó la Iglesia católica Alemana. La cual admitió «al menos» 3,766 casos de abuso sexual infantil por parte del clero entre 1946 y 2014. La revelación llegó en un próximo informe que se filtró a los medios locales Die Zeit y Spiegel Online.
“El problema de los abusos no podrá resolverse sólo con la dimisión de algunos obispos, ni tampoco con nuevas directrices burocráticas. El problema son las redes homosexuales existentes en el clero, que tienen que ser erradicadas”. Así lo señaló Janet Smith (68 años) quien enseña Teología en el Seminario del Sagrado Corazón en Detroit (Michigan), y que anteriormente fue catedrática de Filosofía Clásica en las universidades de Dallas y Notre Dame. Ella conoce bien los complicados vericuetos del clero, aunque haya sido una persona dedicada al estudio y a la formación de jóvenes seminaristas.
Renuncia de un obispo estadounidense
El obispo estadounidense de West Virginia, Michael J. Bransfield fue acusado en el pasado de abusos sexuales a menores de edad en la diócesis de Filadelfia – Estados Unidos, y por acosar a hombres mayores de edad. Actualmente presentó su renuncia, pues este ya alcanzó la edad de jubilación para este gremio que es de 75 años.
“El papa Francisco ha aceptado la renuncia al gobierno pastoral de la diócesis de Wheeling-Charleston presentada por monseñor Michael J. Bransfield”
En el año 2012 fue señalado por haber abusado sexualmente de 10 niños en la década de los 70 y parte de los 80. Posteriormente fue acusado de estar relacionado con otros supuestos, aunque este siempre ha afirmado ser inocente.
Por su parte el Papa ha ordenado una investigación sobre las acusaciones que se han realizado en su contra. Además designó al Arzobispo de Baltimore, William E. Lori, para que remplazará temporalmente el cargo de la Diócesis de Wheeling-Charleston, así como para que se encargue de la averiguación.
El Papa convoca una reunión
El Papa convocó a una reunión que tendrá lugar en el Vaticano el próximo 21 hasta el 24 de febrero de 2019. La misma tendrá como objetivo principal evaluar los casos de abuso sexual, y la forma de cómo prevenirlos, esta será encabezada por todos los presidentes de las conferencias episcopales del mundo.
El encuentro se fija luego de reunirse con el Consejo de Cardenales – llamado C9- que asesora a Bergoglio en las reformas, así como después del escándalo de la denuncia del monseñor Viganó, quien llegó a pedir la renuncia del Papa por haber estado presuntamente encubierto en los abusos del cardenal norteamericano Theodore McCarrick, sancionado el pasado mes de julio.
