Japón anuncia su deseo de desarrollar vehículos voladores y con ello, ha listado algunas compañías para impulsar este proyecto. Se trata de Uber y Airbus, además de Boeing, las primeras elegidas para potenciar esta novedosa idea.
Sumado a estas, otras 21 compañías estarán presentes en la materialización de este sueño de la tecnología y de la ciencia ficción a desplegarse a partir del año 2020. Entre las que se encuentran: All Nippon Airways y Japan Airways, aerolíneas japonesas; también la transportista Yamato y Cartivator, especializada en el desarrollo de vehículos aéreos.
En la union está la fuerza: Japón se une a Boeing, Uber y Airbus entreo otros para empezar a desarrollar y poner en el mercado vehículos voladores en 10 años. Se trata de un esfuerzo titánico pues deben superar numerosas regulaciones y medidas de seguridad. #tecnología #futuro
— Meglob Protector Antishock (@GrupoMeglob) August 25, 2018
Dicho proyecto, fue confirmado por el Ministerio de Comercio nipón en un comunicado. También, informaron una importante reunión que se llevara a cabo el 29 de agosto, con los delegados de las empresas seleccionadas. Ya que, este año necesitan trazar diferentes planes. Asimismo, explican: “El Gobierno proporcionará el refuerzo necesario para llevar a cabo el desarrollo de automóviles voladores”. Además, apoyaran la creación de una regulación adecuada.
¿Por qué la elección de estas compañías?
Como se mencionó anteriormente, uno de los socios escogidos fue Uber, pionero en este sector. Ya que, dicha empresa se ha estado organizando para vender taxis voladores durante la próxima década. Así, la fecha estimada para intensificar su negocio, será a partir del año 2023. Sumado a ello, pretende otras innovaciones en los próximos cinco años, como por ejemplo, invertir en nuevas instalaciones en Paris, para lo cual han destinado 20 millones de euros. Conservando proyectos similares al que desea desarrollar Japón.
Por otro lado, Start – ups de todo el mundo están lanzando aviones enanos, que realmente solo existían en la ciencia ficción. Así, Japón ha decidido integrarse a esta tendencia con la ayuda de empresas aeronáuticas como All Nippon Airways y Japan Airways.
Además, empresas alemanas como Volkswagen y Daimler, están gestionando una nueva idea de transporte, similar a los vehículos voladores. De allí, el interés de Japón por impulsar en esta industria a Cartivator, start-up de Toyota, y así, ser un rival directo de estas compañías.
Pero a pesar de ser un desafío tecnológico y competitivo, también es un reto ambiental para Japón. Esto fue señalado por Hiroshige Seko, ministro de economía de Japón, quien asegura que los vehículos voladores pueden descongestionar las carreteras. Logrando así, una disminución de dióxido de carbono en el aire, además de combatir la contaminación acústica.
Tomando en cuenta también que, los vehículos aéreos podrían facilitar el transporte hacia áreas montañosas e islas remotas, ya que conectarían todo el archipiélago. Fomentando de esta manera, más acercamiento a los espacios naturales del país.
Legalidad de este proyecto en Japón
Uno de los problemas para el establecimiento de autos aéreos, es el tema legal. Por ello, el Gobierno de Japón está dispuesto a suministrar la legislación necesaria para que sus empresas asociadas logren el liderazgo en este sector tecnológico. Ya que, el impulso de vehículos voladores, necesita la aprobación de varios reguladores, como sucede con la aviación.
Asimismo, estas empresas deben tener gran influencia en estándares de seguridad. De lo contrario, los viajeros no aprobaran la novedosa tecnología. Por esto, es sumamente necesario que el Gobierno de Japón establezca normas de seguridad necesarias, antes que otros países para tomar la delantera en esta industria.
