EE.UU. ordeno a sus agentes de inmigración, que discriminen a todos aquellos que hablen español. Es por ello que los agentes de inmigración norteamericanos han comenzado a discriminar a los peticionarios de asilo. Que hablan español o proceden de América Latina. E incluso estas personas están siendo regresadas a México. Mientras sus solicitudes se deciden en los juzgados.
Por lo tanto, ya se han generado varios memorandos internos que revelan un profundo cambio en el trato a los inmigrantes hispanos en EE.UU. y según este trato viene a raíz de las últimas comunicaciones y órdenes del Gobierno estadounidense. Donde se les informa a los agentes que tienen orden de enviar a aquellos que hablen español a México. Cuyo Gobierno, según se sabe ahora, colabora plenamente con la administración de Trump. E impide activamente el cruce de la frontera a cientos de inmigrantes en situación irregular.
Según esta orden, los identificados como centroamericanos o sudamericanos. Serán enviados en caliente a México. Esta es una medida afecta tanto a los solicitantes de asilo como a los que entran en el país de forma ilegal.
Esta política afecta
Esta nueva orden o política implantada, afecta tanto a aquellos que se presentan ante las autoridades para solicitar asilo. Como a aquellas personas inmigrantes que se encuentran detenidos en EE.UU.
Es la primera vez que esto ocurre, ya que hasta ahora, no se había presentado que los agentes de fronteras norteamericanos. Discriminaran a los inmigrantes en función del idioma que hablan o su procedencia nacional.
Normalmente, a estas personas se les permitía permanecer en EE.UU. mientras sus solicitudes se decidían en los juzgados. Por lo que se calcula que actualmente se encuentran en EE.UU. más de 10 millones de inmigrantes en situación irregular. Aunque Trump ha dicho en varias ocasiones que cree que la cifra real supera los 20 millones.
Los agentes tienen la obligación
Según lo establecido en las nuevas órdenes tanto a los peticionarios de asilo y a los inmigrantes ilegales. Los agentes tienen la obligación de devolverlos en caliente a México. Pero solo a quienes hablen español o procedan de Centroamérica o Sudamérica, con contadas excepciones.
Ya que solo quedan exentos mujeres embarazadas, personas enfermas y homosexuales. Esto debido a que en el mes de diciembre, la muerte de dos niños centroamericanos. Cuando se encontraban bajo custodia de las autoridades migratorias de EE.UU. llevó al Gobierno norteamericano a revisar sus políticas para evitar que casos como esos se repitan.
Sin embargo, las réplicas no tardaron y el diputado demócrata de Texas Al Green respondió. Que la Administración Trump está practicando una política migratoria discriminatoria. “Hay quienes piensan que ya hay demasiada gente de color en este país”. “Y estas personas, una de las cuales es el presidente, están dispuestas a adoptar políticas que impedirán a la gente de color entrar en este país. A los niños blancos no se les trataría como usted trata a los niños de color, señora secretaria. Este es un problema de color, de raza”. Afirmo.
